El semanario de información y cultura religiosa "Catalunya Cristiana" ha tenido la gentileza de dedicar su último número a la Custodia Franciscana de Tierra Santa en la celebración del 800º aniversario de la presencia de los franciscanos en los Santos Lugares. Compartimos con vosotros la entrevista que con tal motivo realizaron a Fr. Luis Quintana para elaborar su artículo:
Pdf de la publicación en catalán: descargar aquí
Pdf de la publicación en castellano: descargar aquí
- 800 años de presencia franciscana en Tierra Santa: ¿cuál es la misión de los franciscanos hoy? ¿ha cambiado a lo largo de los siglos o en esencia sigue siendo la misma?
- La misión de los franciscanos en Tierra Santa hoy sigue siendo, en esencia, la misma que hace ochocientos años: custodiar los Santos Lugares y cuidar de la Iglesia madre de Jerusalén. Por ese motivo, los franciscanos han permanecido y siguen permaneciendo allí, incluso en medio de guerras, intifadas y múltiples conflictos. Entendemos por Santos Lugares no solo Israel y los territorios palestinos, sino también Jordania, Egipto, Siria, Líbano, etc. Orar y mantener vivos los Lugares donde nació nuestra fe; acoger y acompañar a los peregrinos que los visitan; ayudar a la comunidad cristiana que allí vive... son algunas de sus principales misiones.
- ¿Se entendería Tierra Santa sin la huella franciscana?
- Claro que sí, porque Tierra Santa es lo que es por el paso del Señor por allí (Jesucristo, María y los apóstoles, anteriormente los patriarcas y profetas, etc), no por la huella franciscana o por el paso de San Francisco. Pero también es cierto que quizá no se entendería HOY Tierra Santa, quizá no existiría tal como la conocemos, sin la huella de Francisco y de tantos franciscanos que en los últimos ochocientos años la han cuidado y mantenido, hasta derramar su sangre en muchas ocasiones. Gracias a ellos podemos rezar en el Cenáculo, celebrar la Misa en Nazaret, besar la tumba vacía del Santo Sepulcro, tocar la estrella de la gruta de Belén...
- Este 800º aniversario sin duda es un momento muy especial para la familia franciscana, ¿qué frutos le gustaría que diera este aniversario? ¿Para qué ha de servir esta celebración?
- Me gustaría que este aniversario sirva para dar gracias a Dios por la presencia de los franciscanos en Tierra Santa, tantas veces poco agradecida, y que se rece por ellos y sus necesidades. Otro fruto precioso que deseo es que aumenten las peregrinaciones a los Lugares Santos, aprovechando que allí los Hermanos Menores les acogen en los Santuarios, y que pueden acompañarles como guías de sus peregrinaciones (¡quién mejor que ellos para explicarles Tierra Santa!). Que viendo las necesidades materiales que tienen, se comprometan con sus bienes y donativos para ayudar a la Iglesia de Jerusalén. Y que el Señor, viendo las muchas necesidades de los franciscanos de Tierra Santa, aumente las vocaciones, en número y santidad.
- ¿Qué retos de futuro tiene la custodia? ¿Cuáles son los principales desafíos?
- En Tierra Santa no se puede hablar mucho de futuro. La situación política tan cambiante y fluctuante no deja hacer cálculos a largo plazo. Por eso, planteo dos retos o desafíos: el primero, que la comunidad cristiana de Tierra Santa aumente, que no disminuya como por desgracia ha sucedido en los últimos años; que los seminarios y noviciados acojan vocaciones locales; que los matrimonios cristianos jóvenes, de procedencia árabe o hebrea, se queden en aquellas ciudades porque de verdad encuentren futuro para ellos y para sus hijos en libertad (para ello, deben tener trabajo, vivienda digna, etc). El segundo reto que planteo es que la Custodia siga cuidando los Santuarios de los Santos Lugares: rehabilitación, construcción de nuevos edificios, restauración de otros... Son muchos los santuarios que atendemos (74 actualmente) y hay otros lugares que guardan tradiciones de diversos hechos bíblicos o evangélicos. Todos ellos deberían tener una mínima estructura para acoger y mostrar al peregrino lo que allí aconteció, lo que el Señor hizo para nuestra salvación.
- ¿Qué implica ser franciscano en Tierra Santa?
- Ser franciscano en Tierra Santa implica ser testigo del Resucitado en su propia tierra, dispuesto incluso a dar la vida por El, pasando por muchas incomodidades y dificultades, en muchos casos muy lejos del país de origen, aprendiendo nuevas lenguas y culturas, en una situación difícil en medio de gentes judías y musulmanas, además de cristianos de otras confesiones, etc. Hace falta estar muy enamorado de Cristo para ser franciscano en Tierra Santa. Ser franciscano allí implica tener un corazón muy grande, donde quepan frailes de más de 40 nacionalidades distintas con los que has de vivir en fraternidad, donde quepan cientos y miles de peregrinos que día a día conocerán y pedirán confesiones, consejos, etc, donde quepan los cristianos locales con sus múltiples dificultades y problemas, y donde quepan finalmente tantas personas, de otros credos y culturas, pero necesitadas también de la paz y el bien que San Francisco nos enseñó.
- ¿Cuál es el mensaje de Tierra Santa para nuestra humanidad herida en este siglo XXI?
- Es un mensaje de PAZ. En Belén nació el Dios de la paz, en un pobre pesebre dentro de una cueva, hecho niño indefenso por nosotros. En Jerusalén, la ciudad de la paz, murió y resucitó el Señor para darnos paz... En la tierra más conflictiva del mundo, Dios quiere que se irradie la paz sobre todo el mundo: "Gloria a Dios en el cielo, y paz en la tierra..."
- La experiencia de Tierra Santa, ¿siempre transforma? ¿se puede ir como turista y volver como peregrino?
- Tierra Santa no deja indiferente a nadie. Cada uno va con unas expectativas... y Dios siempre sorprende. Por eso cuando me preguntan qué hacer para preparar su peregrinación, les invito no a que lean libros o se informen sobre la historia y el arte del lugar, sino que abran su corazón, que lean el Evangelio, y vayan sin ninguna expectativa, dejándose sorprender por Dios. Dios hace su obra como quiere, transforma los corazones cuando considera oportuno (quizá no durante el viaje, puede ser poco tiempo después...), pero Tierra Santa siempre deja la semilla de Dios en el corazón, para que germine a su tiempo y produzca su fruto. Son muchos los que he visto que han ido como turistas, y han vuelto como peregrinos, o dispuestos a empezar un camino vocacional, deseo de confirmarse y casarse por la Iglesia, intención de entrar en el seminario diocesano, etc.
- La Comisaría de Tierra Santa de la provincia de la Inmaculada, ¿cómo va a celebrar este 800 aniversario?
- Nuestra Comisaría de Tierra Santa también se suma a las celebraciones del 800 aniversario de la presencia franciscana en Tierra Santa. Este año hemos propuesto más peregrinaciones que el año pasado, con este motivo (de ahí los logotipos del centenario que estamos usando en nuestros medios y publicidad), también se han hecho (en febrero, marzo y mayo especialmente) y se harán (en septiembre y octubre) ciclos de conferencias, charlas y mesas redondas... La publicación de la revista Tierra Santa (elaborada por la Custodia, pero difundida por la Comisaría) informa sobre las noticias del aniversario, así como el blog "tierrasanta-ofminmaculada.blogspot.com" y la hoja "Tierra de Jesús", que periódicamente informa a nuestros peregrinos y amigos sobre todo lo relacionado con Tierra Santa, y este año con el aniversario.
- A nivel personal, ¿qué supone para usted estar al frente de la Comisaría de Tierra Santa?
- En primer lugar debo decir que no estoy solo. Somos un equipo de seis frailes (uno es vicecomisario y los otros cuatro me ayudan desde los distintos territorios de la Provincia), además de tres laicos que hacen funciones de secretaría (en Barcelona, Valencia y Madrid) y otros muchos frailes y laicos que colaboran como guías de Tierra Santa o voluntarios de las diversas necesidades.
Ser Comisario de Tierra Santa es una gran responsabilidad, pues para 49 diócesis debo coordinar todo lo relacionado con aquella bendita tierra: difusión y amor por los Santos Lugares, peregrinaciones, grupos de Amigos de Tierra Santa, colectas y donativos, etc. Sé que aunque soy franciscano, mi misión traspasa las fronteras de nuestra Orden, que debo coordinar las peregrinaciones católicas (entre otras cosas) que salgan de nuestro territorio, independientemente de la espiritualidad, movimiento o congregación que haya detrás. Por ese motivo deseo estar cercano a todos, ofreciendo mi servicio de mediación y coordinación.
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- 800 años de presencia franciscana en Tierra Santa: ¿cuál es la misión de los franciscanos hoy? ¿ha cambiado a lo largo de los siglos o en esencia sigue siendo la misma?
- La misión de los franciscanos en Tierra Santa hoy sigue siendo, en esencia, la misma que hace ochocientos años: custodiar los Santos Lugares y cuidar de la Iglesia madre de Jerusalén. Por ese motivo, los franciscanos han permanecido y siguen permaneciendo allí, incluso en medio de guerras, intifadas y múltiples conflictos. Entendemos por Santos Lugares no solo Israel y los territorios palestinos, sino también Jordania, Egipto, Siria, Líbano, etc. Orar y mantener vivos los Lugares donde nació nuestra fe; acoger y acompañar a los peregrinos que los visitan; ayudar a la comunidad cristiana que allí vive... son algunas de sus principales misiones.
- ¿Se entendería Tierra Santa sin la huella franciscana?
- Claro que sí, porque Tierra Santa es lo que es por el paso del Señor por allí (Jesucristo, María y los apóstoles, anteriormente los patriarcas y profetas, etc), no por la huella franciscana o por el paso de San Francisco. Pero también es cierto que quizá no se entendería HOY Tierra Santa, quizá no existiría tal como la conocemos, sin la huella de Francisco y de tantos franciscanos que en los últimos ochocientos años la han cuidado y mantenido, hasta derramar su sangre en muchas ocasiones. Gracias a ellos podemos rezar en el Cenáculo, celebrar la Misa en Nazaret, besar la tumba vacía del Santo Sepulcro, tocar la estrella de la gruta de Belén...
- Este 800º aniversario sin duda es un momento muy especial para la familia franciscana, ¿qué frutos le gustaría que diera este aniversario? ¿Para qué ha de servir esta celebración?
- Me gustaría que este aniversario sirva para dar gracias a Dios por la presencia de los franciscanos en Tierra Santa, tantas veces poco agradecida, y que se rece por ellos y sus necesidades. Otro fruto precioso que deseo es que aumenten las peregrinaciones a los Lugares Santos, aprovechando que allí los Hermanos Menores les acogen en los Santuarios, y que pueden acompañarles como guías de sus peregrinaciones (¡quién mejor que ellos para explicarles Tierra Santa!). Que viendo las necesidades materiales que tienen, se comprometan con sus bienes y donativos para ayudar a la Iglesia de Jerusalén. Y que el Señor, viendo las muchas necesidades de los franciscanos de Tierra Santa, aumente las vocaciones, en número y santidad.
- ¿Qué retos de futuro tiene la custodia? ¿Cuáles son los principales desafíos?
- En Tierra Santa no se puede hablar mucho de futuro. La situación política tan cambiante y fluctuante no deja hacer cálculos a largo plazo. Por eso, planteo dos retos o desafíos: el primero, que la comunidad cristiana de Tierra Santa aumente, que no disminuya como por desgracia ha sucedido en los últimos años; que los seminarios y noviciados acojan vocaciones locales; que los matrimonios cristianos jóvenes, de procedencia árabe o hebrea, se queden en aquellas ciudades porque de verdad encuentren futuro para ellos y para sus hijos en libertad (para ello, deben tener trabajo, vivienda digna, etc). El segundo reto que planteo es que la Custodia siga cuidando los Santuarios de los Santos Lugares: rehabilitación, construcción de nuevos edificios, restauración de otros... Son muchos los santuarios que atendemos (74 actualmente) y hay otros lugares que guardan tradiciones de diversos hechos bíblicos o evangélicos. Todos ellos deberían tener una mínima estructura para acoger y mostrar al peregrino lo que allí aconteció, lo que el Señor hizo para nuestra salvación.
- ¿Qué implica ser franciscano en Tierra Santa?
- Ser franciscano en Tierra Santa implica ser testigo del Resucitado en su propia tierra, dispuesto incluso a dar la vida por El, pasando por muchas incomodidades y dificultades, en muchos casos muy lejos del país de origen, aprendiendo nuevas lenguas y culturas, en una situación difícil en medio de gentes judías y musulmanas, además de cristianos de otras confesiones, etc. Hace falta estar muy enamorado de Cristo para ser franciscano en Tierra Santa. Ser franciscano allí implica tener un corazón muy grande, donde quepan frailes de más de 40 nacionalidades distintas con los que has de vivir en fraternidad, donde quepan cientos y miles de peregrinos que día a día conocerán y pedirán confesiones, consejos, etc, donde quepan los cristianos locales con sus múltiples dificultades y problemas, y donde quepan finalmente tantas personas, de otros credos y culturas, pero necesitadas también de la paz y el bien que San Francisco nos enseñó.
- ¿Cuál es el mensaje de Tierra Santa para nuestra humanidad herida en este siglo XXI?
- Es un mensaje de PAZ. En Belén nació el Dios de la paz, en un pobre pesebre dentro de una cueva, hecho niño indefenso por nosotros. En Jerusalén, la ciudad de la paz, murió y resucitó el Señor para darnos paz... En la tierra más conflictiva del mundo, Dios quiere que se irradie la paz sobre todo el mundo: "Gloria a Dios en el cielo, y paz en la tierra..."
- La experiencia de Tierra Santa, ¿siempre transforma? ¿se puede ir como turista y volver como peregrino?
- Tierra Santa no deja indiferente a nadie. Cada uno va con unas expectativas... y Dios siempre sorprende. Por eso cuando me preguntan qué hacer para preparar su peregrinación, les invito no a que lean libros o se informen sobre la historia y el arte del lugar, sino que abran su corazón, que lean el Evangelio, y vayan sin ninguna expectativa, dejándose sorprender por Dios. Dios hace su obra como quiere, transforma los corazones cuando considera oportuno (quizá no durante el viaje, puede ser poco tiempo después...), pero Tierra Santa siempre deja la semilla de Dios en el corazón, para que germine a su tiempo y produzca su fruto. Son muchos los que he visto que han ido como turistas, y han vuelto como peregrinos, o dispuestos a empezar un camino vocacional, deseo de confirmarse y casarse por la Iglesia, intención de entrar en el seminario diocesano, etc.
- La Comisaría de Tierra Santa de la provincia de la Inmaculada, ¿cómo va a celebrar este 800 aniversario?
- Nuestra Comisaría de Tierra Santa también se suma a las celebraciones del 800 aniversario de la presencia franciscana en Tierra Santa. Este año hemos propuesto más peregrinaciones que el año pasado, con este motivo (de ahí los logotipos del centenario que estamos usando en nuestros medios y publicidad), también se han hecho (en febrero, marzo y mayo especialmente) y se harán (en septiembre y octubre) ciclos de conferencias, charlas y mesas redondas... La publicación de la revista Tierra Santa (elaborada por la Custodia, pero difundida por la Comisaría) informa sobre las noticias del aniversario, así como el blog "tierrasanta-ofminmaculada.blogspot.com" y la hoja "Tierra de Jesús", que periódicamente informa a nuestros peregrinos y amigos sobre todo lo relacionado con Tierra Santa, y este año con el aniversario.
- A nivel personal, ¿qué supone para usted estar al frente de la Comisaría de Tierra Santa?
- En primer lugar debo decir que no estoy solo. Somos un equipo de seis frailes (uno es vicecomisario y los otros cuatro me ayudan desde los distintos territorios de la Provincia), además de tres laicos que hacen funciones de secretaría (en Barcelona, Valencia y Madrid) y otros muchos frailes y laicos que colaboran como guías de Tierra Santa o voluntarios de las diversas necesidades.
Ser Comisario de Tierra Santa es una gran responsabilidad, pues para 49 diócesis debo coordinar todo lo relacionado con aquella bendita tierra: difusión y amor por los Santos Lugares, peregrinaciones, grupos de Amigos de Tierra Santa, colectas y donativos, etc. Sé que aunque soy franciscano, mi misión traspasa las fronteras de nuestra Orden, que debo coordinar las peregrinaciones católicas (entre otras cosas) que salgan de nuestro territorio, independientemente de la espiritualidad, movimiento o congregación que haya detrás. Por ese motivo deseo estar cercano a todos, ofreciendo mi servicio de mediación y coordinación.
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