Tierra Santa: “Manantial de leche y miel"

Paz y Bien.

Queremos compartir con vosotros este hermoso texto que nos envía Fr. Antonio Arévalo, ofm, reflexionando sobre Tierra Santa:

"Es comprensible que, para el nómada, habituado al suelo inhóspito,  el terruño de las palmeras, de las parras y de las higueras con sus frutos almibarados, resulte apetitoso y que lo anhele como un niño se deleita con la leche y la miel. En la tierra que el Eterno prometió a nuestro padre Abraham, los hebreos satisfarían a raudales su imaginación, aunque en mi peregrinación a la Tierra Santa, el año 2012 la dulzura que yo buscaba era muy otra, pese a los dátiles de  Jericó. Vivo desde entonces con la nostalgia del retorno y al término de cada Pascua, como el judío errante, me digo interiormente El próximo año en Jerusalén. Me ayudo, entre tanto, de la romería vivísima de las cuentas y misterios del Rosario, con el dulce paso por los lugares y santuarios que rezamos y evocamos. Son los misterios gozosos y los evangelios de la infancia de nuestro Señor los que próximamente celebraremos, bajo el conducto y los velos sacramentales. Con lo que, a la leche y miel del israelita, juntaremos el pan sabrosísimo de Belén (nuestra casa del pan). De una doncella nazarena, mujer eucarística —en labios de san Juan Pablo II—, nos han bendecido con el verdadero maná bajado del cielo, al que se añade el vino mejor, anticipado en el que se escanció en Caná tras aquel Haced lo que él os diga. La Virgen María, ternura de Dios, y el fruto de su vientre, Jesús, son de allí y le debemos más de una visita en el lugar de los hechos. Porque en aquel terruño fuimos rescatados del proceder inútil de nuestra carne; donde fuimos abrazados y revestidos del traje de bodas, del anillo y las sandalias; donde hay preparado un suculento banquete de vinos de solera, al que hemos sido invitados, aunque nos recogieron, en segundo lugar, de los cruces de los caminos." Fray Antonio Arévalo Sánchez, ofm 

Sentimos, como fr. Antonio, nostalgia de volver a Tierra Santa. Confiamos en que Israel pueda muy pronto reabrir sus fronteras y permitir el regreso de los peregrinos. De momento, nosotros seguimos organizando una salida del 22 al 29 de diciembre, que acompañaría fr Pedro González, otra del 29 de diciembre al 5 de enero con fr. Juan Pedro Ortega, y otra del 3 al 10 de febrero con fr Luis Quintana. Lo ponemos en manos de Dios; que Él os dé la Paz.